La FIFA alerta a Brasil que aún hay mucho por hacer para el Mundial-2014

El secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, llamó a Brasil a trabajar más duro para ofrecer comodidad al medio millón de extranjeros que llegará al país y se trasladará de una ciudad a otra siguiendo a sus selecciones, en el primer día del de la conferencia Soccerex, el mayor salón del fútbol mundial, que se realiza en Rio de Janeiro hasta el miércoles. "Su prioridad es que Brasil gane el Mundial, la de la FIFA es que esté perfectamente organizado", dijo Valcke dirigiéndose al auditorio. A fines de marzo, el jerarca de la FIFA reprochó al gigante sudamericano estar más preocupado por conquistar el título que por organizar la mayor fiesta del fútbol mundial, y hasta dijo que Brasil precisaba de una "patada en el culo" para acelerar los preparativos. Sus declaraciones desataron la ira del gobierno brasileño, que le declaró persona non grata, aunque luego ambos hicieron las paces. "Debemos trabajar duro para estar seguros de que los hinhas serán bien recibidos", afirmó Valcke. "Hay una ciudad donde hay 17.000 cuartos y el estadio tiene 45.000 plazas. Diría que hay algo que no está funcionando perfectamente", indicó Valcke, sin identificar cuál de las 12 ciudades sede del Mundial no cumple con los requisitos de alojamiento. Si "pusiéramos a tres en la misma cama, esa sería la única manera de tener éxito. De lo contrario aún tendríamos 10.000 personas sin cama", afirmó. Valcke afirmó que la FIFA trabaja con las ciudades sede para ver "cuándo y cómo se traslada a esta gente a sus habitaciones, o a la próxima ciudad en la que juega su selección, que el aeropuerto opere durante largos horarios, que haya suficiente personal en aeropuertos, que haya suficiente espacio en los aeropuertos para los aviones". No obstante, indicó que las peleas han quedado atrás. "Ya no tratamos de pelearnos porque no sirve para nada. A diferencia de una pareja, la FIFA y el COL no pueden divorciarse. Lo más importante es trabajar juntos para hallar soluciones a los problemas que se plantean", afirmó. Para la Copa Confederaciones, una suerte de ensayo del Mundial que se jugará entre ocho selecciones en seis ciudades brasileñas del 15 al 30 de junio de 2013, los desafíos son menores, afirmó Valcke. "Hay estadios que están más o menos cumpliendo el calendario, y hay otros que estarán prontos a mediados o fines de abril como máximo, lo cual implica un desafío para nosotros, ya que tendremos poco tiempo para hacer ensayos", indicó. Pero durante la Copa Confederaciones "habrá menos gente volando desde el extranjero, menos gente usando aeropuertos, menos gente usando transporte público, hoteles en las seis ciudades. Por eso aunque la fecha de entrega (de algunos estadios) sea posterior a la fecha de entrega prevista, podremos vivir con eso", señaló. Valcke tenía previsto visitar este lunes junto a miembros del COL el mítico estadio Maracaná de Rio, en plenas reformas y donde se jugará la final del Mundial-2014. Luego visitará los estadios de Sao Paulo -donde participará en el sorteo de la Copa Confederaciones el sábado- y Curitiba. La conferencia Soccerex, que reúne hasta el miércoles a unos 15.000 dirigentes, hinchas y empresarios en Rio, comenzó con el compromiso de las autoridades de modernizar la "arcaica" infraestructura deportiva de Brasil. "Brasil, que sufría con estadios arcaicos, tendrá 12 nuevos estadios para la Copa del Mundo de la FIFA, con estructuras modernas, que proporcionan nuevas oportunidades de negocios, camarotes, áreas de entretenimiento", y con "más seguridad y mejores condiciones para ver los partidos", destacó el presidente del COL y la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), José Maria Marin. "El país del fútbol no puede tener un gramado de nivel inferior. Trabajaremos para que todos nuestros estadios tengan los mejores tapetes", afirmó. Uno de los ausentes en la inauguración fue el vicepresidente de la CBF y miembro del Comité Ejecutivo de la FIFA, Marco Polo del Nero, quien debió declarar en la Policía Federal luego del registro y decomiso en su casa de varios documentos, en el marco de una operación para desarticular dos organizaciones criminales. En 9.000 m2 frente a la playa de Copacabana se levantan stands de los expositores de Soccerex, desde las 12 ciudades sedes del Mundial, pasando por grandes clubes nacionales e internacionales, hasta pequeñas empresas contratistas. Soccerex ofrece debates sobre el millonario negocio del fútbol, como por ejemplo el manejo de la imagen en el deporte, y sobre todo cómo hacerla lucrativa, y la costosa venta de derechos de transmisión de los juegos.