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Sabor a gloria

La victoria de la Selección Colombia ante Francia genera ilusión de cara a Rusia 2018

Por Ángel Julio Rodelo Twitter: @anjulro

Tantas veces, se ha afirmado que los resultados en los partidos de preparación no tienen relevancia. Premisa que no comparto, porque siempre habrá que medir el porte histórico y presente deportivo del rival que se enfrenta.

Digan lo que digan, no tiene el mismo valor un triunfo sobre el seleccionado de Cafarnaúm, que el recién obtenido por el combinado nacional de fútbol ante Francia.

Se disfruta, se paladea  e ilusiona la presentación del elenco colombiano en Saint Denis. La remontada fue fenomenal, con sabor a gloria, y los tres goles reflejan la contundencia a la hora de definir.

Es cierto, no se compitió en Rusia, pero sí en terreno europeo frente a un oponente con favoritismo a levantar la Copa ecuménica del fútbol. Y eso dignifica, aún más, la faena de los nuestros.

Sin obnubilarse, porque no se puede inadvertir las desatenciones en marca e irregularidades funcionales del primer tiempo, el trámite expuesto en el segundo tramo del partido fue lleno de autoridad y dominio en las fases de juego, hasta el punto de minimizar y dominar a los franceses.

Neutralizar a Mbappé, Griezmannn, Giroud y Dembelé, fue una labor meritoria, que se pudo consolidar de acuerdo a los compromisos tácticos y de bloque, que operaron de forma sostenida y segura. En ese orden, Sánchez, Aguilar y Uribe, en acople solidario con los hombres del fondo y delanteros, comprimieron la zona y minimizaron el juego de profundidad que planteaban los dirigidos por Didier Deschamps.

Interesante, por demás, que, tanto Muriel y Falcao, aportaron la cuota de gol respectiva; y, de cara al Mundial, Quintero confirmó la confianza de Pékerman. Como también, valiosas las opciones de Izquierdo y Lerma.

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