Teófilo y una expulsión pendiente

En un partido donde el fútbol brilló por su ausencia, el que se hizo protagonista de la noche fue el central bogotano, Andrés Rojas, quien mostró 12 tarjetas amarillas a lo largo del compromiso y quedó en deuda con un par de tarjetas rojas.

Y es que no sorprendió la actuación de Elkin Blanco que pegó durante los 90 minutos, jugó condicionado desde el minuto 15 y realizó varias entradas descalificadoras que merecieron por lo menos la segunda tarjeta amarilla. Pero, lo que se robó el show en el Pascual Guerrero fue la patada de Teófilo Gutiérrez sobre Blanco en el final del encuentro, la cual fue violenta y merecía la roja directa por la manera en que el barranquillero le clavó los taches en la canilla a su rival.

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El partido se le salió de las manos al central, quién no supo guiar el encuentro al que le faltó fantasía y careció de magia. Atributos que tuvieron las tribunas embellecidas por 37.000 hinchas que asistieron al partido de ida de los cuartos de final de la Liga Águila.

Los hinchas ‘Escarlatas’ se quedaron esperando la victoria de un América que en la previa parecía renovado y crecido luego de espantar el fantasma del descenso, pero que en la cancha volvió a mostrar las mismas falencias ofensivas que ha tenido a lo largo del semestre.

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Ahora la ‘Mecha’ deberá tener una actuación casi perfecta en Barranquilla si quiere avanzar en la Liga, mientras que los ‘Tiburones’ ya piensan en Flamengo, rival al que enfrentarán el próximo jueves por la vuelta de la semifinal de la Copa Sudamericana.