Contra todo y ante todos, Ali recuperó el título del mundo frente al imbatible Foreman

Tal vez uno de los mayores ejemplos en el mundo del deporte para saber que #NadaEstáPerdido

Por: David Fernando Rocha Cubillos

@davikorocha

Pensar en sobrellevar los problemas, no rendirse, superar cada obstáculo y conseguir los objetivos trazados; estos fueron unos de los tantos pilares de la carrera deportiva de Muhammad Ali, considerado por muchos el deportista más grande en la historia de Estados Unidos. Y es que además de lo hecho en el boxeo, el pugilista fue un ícono de la contracultura en el mundo por luchar ante el poder conservador estadounidense y el racismo. Esta historia parece de película, y en parte lo fue porque hasta el actor Will Smith lo interpretó en 'Ali (2001)'.

Todo comienza después de que Cassius Clay, como se llamaba, ya era campeón del mundo tras derrotar a Sonny Liston en 1964. El boxeador se popularizó por su rebeldía en todo momento al no seguir las reglas conservadoras en contra del afroamericano, incluso se cambió al nombre de Muhammad Ali tras volverse seguidor del islam. Hecho que lo llevó a ser señalado por la 'alta' sociedad americana que no lo veía con buenos ojos, ya que promulgaba "el mal ejemplo hacia la juventud", decían los diarios de esa época.

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Pero el punto de inflexión de esta historia fue cuando el gobierno de Estados Unidos lo reclutó como soldado para la Guerra de Vietnam en 1966. Ali, sin dudarlo, se negó al llamado, pese a ser declarado apto. "No tengo problemas con los Vietcongs (Frente Nacional de Liberación de Vietnam); ellos nunca me llamaron ‘nigger’ (ofensa en inglés hacia el afroamericano)", le decía a la prensa.

Esta negativa hacia el gobierno hizo que la Comisión Atlética del Estado de Nueva York le quitara el título mundial y la licencia para boxear. Tres años y medio duró Ali sin poder subirse al cuadrilátero; no obstante, no se rindió nunca y fuera del deporte luchó para defender los derechos de su pueblo e ir en contra de la guerra de Vietnam, a tal punto que se volvió en un símbolo para la juventud americana multiracial, sin excepción alguna.

Ali utilizó la estrategia 'rope a dope', que tenía como finalidad cansar a su oponente mientras resistía los golpes del rival. Así le quitó el título de los pesos pesados a Foreman en Zaire.

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También fue sentenciado a cinco años de prisión, donde le tocó soportar las burlas y críticas. Siempre decía cada vez que podía hablar ante la prensa que su objetivo era recuperar el título del mundo "que nadie me pudo arrebatar en el ring".

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Luego de aguantar mucho, la Comisión Atlética de Nueva York le devolvió la licencia para boxear. Su regreso al deporte de las 'narices chatas' fue difícil: obtuvo dos victorias, pero perdió el combate por el título contra Joe Fraizer en 1971.

No se rindió y volvió a luchar contra Fraizer, que ya no tenía el título del mundo. Ali le ganó por puntos, se sentía ya en forma y listo para retar al ahora campeón George Foreman.

Quería recuperar lo que era suyo por derecho, pero tenía al frente a nada más ni nada menos que a Foreman, dueño de la corona. Los medios decían que era imposible que Muhammad conquistara el título, pues con 32 años enfrentaba a un joven prodigio de 25 e invicto, cuyas últimas ocho peleas no pasaban del segundo asalto. No obstante, Ali nunca agachó la cabeza e insistió...

El 30 de octubre de 1974 se programó lo que para muchos ha sido la 'pelea del siglo' en Kinshasa - Zaire en el África, hoy República Democrática del Congo.

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Muhammad Ali derrotó a George Foreman en Zaire y ganó el título de campeón de los pesos pesados.

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Este evento marcó un antes y un después en el deporte porque se transmitió en vivo para todo el mundo. Incluso, en vísperas de la pelea se realizó el Festival Zaire'74, donde grandes músicos afroamericanos fueron invitados para los actos protocolarios, dentro de los cuales se destacaban James Brown, B.B. King, The Spinners y La Fania All Stars.

El día 'D' había llegado y en el estadio 20 du Maipara de Kinshasa el local siempre fue Muhammad Ali. La gente lo apoyó durante toda la complicada lucha ante un Foreman fuerte que atacó desde el primer momento. Ali utilizó la estrategia 'rope a dope', que tenía como finalidad cansar a su oponente mientras resistía los golpes del rival.

La lucha la pudo aguantar hasta el octavo asalto: ahí Muhammad Ali atacó con todo lo que tenía y ante la mirada del mundo entero consiguió noquear al invencible Foreman. ¡Era campeón otra vez!

Esta histórica pelea también fue llamada después como 'The Rumble in the Jungle' (el estruendo en la selva o pelea en la selva). El evento todavía es considerado como uno de los hechos más significativos del deporte en el siglo XX. Por supuesto, Ali le demostró al mundo entero que pese a todos los obstáculos que existen en la vida, nada está perdido.

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